Sergio Camello y sus férreos valores en el fútbol profesional: "No me verás con una camiseta de 600 euros, mi madre gana 700"

El futbolista Sergio Camello ha terminado por ‘romperla’ este verano en los Juegos Olímpicos de París, un hito que ha colocado al joven de 23 años en el centro de todos los focos. Él, sin embargo, mantiene los pies en la tierra en un fútbol profesional que define como «una burbuja» con los humildes valores con los que siempre se formó en su casa.

Así lo ha desvelado en una entrevista ofrecida al diario ABC en la que repasó sus orígenes en el seno de una familia trabajadora y dejó una serie de reflexiones que sorprenden en boca de un futbolista profesional de su nivel.

«No éramos pobres, pero siempre fuimos muy humildes», dice al recordar las ocasiones especiales en las que la familia se podía permitir ir a comer al restaurante chino de su barrio. Memorias que le llevan a actuar de manera muy diferente a la de muchos de sus compañeros que no dudan en disfrutar la opulencia.

«No me verás con una camiseta de 600 euros cuando mi madre gana 700 al mes», dice un futbolista que asegura que ese tipo de detalles no entran en su cabeza. «Ni siquiera tengo un reloj caro. No creo que pueda tener uno si miro a mi hermano y él no tiene uno», asegura.

Lo curioso de su caso es que Camello, formado en las categorías del Atlético de Madrid, siempre ha vivido rodeado por un ambiente del fútbol más exclusivo y siempre ha sabido apartarse de ese tipo de vida.

«Yo vengo de un vestuario, el del Atlético, donde hay más egos, más estrellas (…) En un club como el Atlético hay jugadores que han disputado finales de Champions, hay campeones del mundo… Entonces no son, digamos, personas reales. Si yo vivo en una burbuja, ellos viven en una burbuja mayúscula», asevera en la entrevista en la que también recalca las diferencias con la experiencia del vestuario del Rayo Vallecano.

En el Rayo hay gente que valora todo mucho más

«Aquí [en el Rayo Vallecano] hay gente que se ha currado sus años en Tercera, Segunda… Es gente que valora todo mucho más», reflexiona un hombre que ve la vida de una manera muy propia y personal, pese a que ahora sí, ya se ha consolidado en la élite del fútbol mundial.